
NOTICIAS
Los tóxicos domésticos también dañan la salud de nuestros animales de compañía.
Las mascotas son más vulnerables a algunos tóxicos que los humanos, de ahí que la ciencia las considere “centinelas” que alertan tempranamente de riesgos para salud humana.
La iniciativa Hogar sin tóxicos, basándose en la evidencia científica, alerta sobre los riesgos que entraña la contaminación química cotidiana no solo para las personas, sino también para los perros y gatos con los que convivimos en uno de cada tres hogares[i]. En España hay más de 9 millones de perros y unos 6 millones de gatos[ii], y 8 de cada 10 de sus tutores los consideran un miembro más de la familia[iii].Sin embargo, a pesar de estos estrechos lazos afectivos y de la creciente preocupación social por el bienestar animal[iv], hay un aspecto que puede ser de extraordinaria relevancia para la salud y calidad de vida de muchos perros y gatos: el de su exposición a numerosas sustancias tóxicas en la vida cotidiana. “Un aspecto en el que, lamentablemente, aún no se ha puesto la debida atención”, tal y como afirma el responsable de Hogar sin tóxicos, Carlos de Prada.
Diferentes investigaciones han mostrado que los animales de compañía pueden verse más expuestos y ser más vulnerables que los humanos ante algunos tóxicos cotidianos. Algo que, en opinión de Carlos de Prada, “ha de representar un llamamiento a la conciencia de los dueños, ya que los animales no pueden decidir y somos nosotros los que les procuramos todo. Nuestro amor por ellos debe ser otro aliciente para intentar reducir al máximo la presencia de tóxicos en nuestro entorno cotidiano, que también es el suyo. Porque somos nosotros los que lo decidimos todo por ellos: dónde viven, rodeados de qué sustancias, qué comen, qué beben, etc”. Por otro lado, añade que “ello asegurará aún más la salud de las personas, ya que la ciencia considera a las mascotas como ‘especies centinela[v]’ o ‘sistemas de alerta temprana[vi]’ del riesgo de algunas enfermedades para los humanos”.
Algunos científicos hablan incluso de las mascotas como los nuevos “canarios de la mina”[vii] al padecer enfermedades comunes con las personas y evidenciar aún más claramente el papel que los factores ambientales pueden tener en el riesgo de enfermedades crónicas. Porque, dadas las exposiciones ambientales compartidas con los humanos, y el hecho de que en estos animales puede darse una mayor presencia de algunos contaminantes[viii], la enfermedad del animal podría presagiar una enfermedad posterior en su dueño. Factores como tener un periodo de latencia más corto que los humanos para el desarrollo de patologías, así como una más rápida progresión de las mismas después de la exposición a sustancias tóxicas[ix], aportan ventajas de cara a la investigación médica[x].
Vías de exposición a los contaminantes
Perros y gatos comparten con los humanos buena parte del riesgo derivado de las exposiciones químicas que se pueden dar en el hogar[xi] y, con frecuencia, las sufren con más intensidad. Por ejemplo, por permanecer más tiempo dentro de las casas y estar en consecuencia más expuestos al polvo doméstico en los suelos, que puede estar cargado de contaminantes químicos, como retardantes de llama[xii] o PFAS[xiii], entre otras sustancias. Esto reviste incluso más relevancia en el caso de los gatos, que no paran de acicalarse y lamerse el pelaje[xiv], aunque también afecte a los perros. Esta mayor exposición a los contaminantes del polvo doméstico es algo que, en mayor o menor grado, comparten con los niños pequeños, que pasan mucho tiempo gateando por el suelo y se llevan las manos a la boca. Se ha visto que tanto en gatos como en niños la cantidad de polvo que llegan a ingerir puede ser hasta siete veces mayor que en los adultos[xv].
Diversos estudios han evaluado la exposición de las mascotas a numerosas sustancias tóxicas[xvi] a través de lo que ingieren, inhalan o absorben por la piel. La alimentación, por ejemplo, se ha considerado una importante vía de exposición de los perros[xvii] y los gatos a diferentes contaminantes[xviii]. La comida comercial para mascotas, en concreto, ha sido objeto de varias investigaciones[xix] y se han podido detectar y medir diferentes sustancias disruptoras endocrinas en comida seca y húmeda para los canes[xx] y los felinos[xxi]. Sustancias como el bisfenol A han venido siendo analizadas en la comida enlatada para estos animales[xxii], igual que sucede con las latas para humanos. En opinión de Carlos de Prada, “debemos reflexionar sobre qué estamos dando de comer a nuestros animales de compañía y si no deberíamos aplicar con ellos, en la medida de lo posible, algunos de los consejos sanitarios que se dan a las personas, como el de no ingerir demasiada comida ultraprocesada. Se lo debemos”.
También se ha estudiado la liberación de sustancias como ftalatos y bisfenoles desde algunos objetos que los perros pueden llevarse a la boca y morder[xxiii], como sucede con algunos juguetes destinados a estos animales. Se trata de algo sobre lo que la UE, por ejemplo, ha establecido regulaciones en el caso de la exposición de los niños pequeños[xxiv], sin que haya sucedido del mismo modo en el caso de las mascotas, menos protegidas por la legislación.
Por otro lado, una investigación americana[xxv] encontró en el cuerpo de animales de compañía concentraciones elevadas de diferentes pesticidas que podían suponer un riesgo para su salud, destacando en especial las del imidacloprid[xxvi], un neonicotinoide ampliamente empleado como antiparasitario en perros y gatos. Otros estudios abordan cómo ciertos insecticidas contra pulgas y garrapatas también muy usados en los perros, como el fipronil, pueden generar también exposición en las personas[xxvii], especialmente en los niños[xxviii]. También se ha evaluado como ingresan en el organismo canino los herbicidas usados en un jardín[xxix] (que podrían impregnar al animal hasta el punto de convertirlo en fuente de exposición humana cuando luego entra en la casa[xxx]). Del mismo modo, se han documentado otras posibles vías de contaminación que pueden afectar a los animales de compañía[xxxi].
Cada vez más cánceres y otras enfermedades
Según los científicos, la creciente prevalencia de algunos problemas de salud en perros y gatos podría tener que ver, en mayor o menor grado, junto con otros posibles factores, con su exposición a contaminantes químicos[xxxii]. Tal es el caso de varios cánceres, trastornos tiroideos, diabetes, enfermedades cardiacas y renales o problemas reproductivos.
Como sucede con las personas, las tasas de cáncer canino están creciendo considerablemente. En EEUU se estiman en 6 millones de perros los diagnosticados de cáncer cada año[xxxiii] y se calcula que uno de cada cuatro perros lo desarrollará a lo largo de su vida (y casi la mitad de los perros mayores de 10 años)[xxxiv]. La ciencia ha mostrado vínculos entre la exposición a tóxicos químicos presentes en el entorno doméstico y un mayor riesgo de que los canes desarrollen algunas de estas patologías. Así, por ejemplo, varias investigaciones[xxxv] han asociado un mayor riesgo de que los perros desarrollen linfomas malignos con un mayor uso de algunos herbicidas[xxxvi] en el césped de las casas, con vivir en zonas industriales o con tener dueños que manejasen mucho pinturas y disolventes[xxxvii], entre otras posibilidades[xxxviii].
Existen también estudios que asocian el cáncer de mama en perras con diferentes sustancias tóxicas. Por ejemplo, con una mayor presencia en su organismo de residuos de insecticidas piretroides[xxxix], algunos de los cuales pueden ser usados frecuentemente en los hogares[xl]. También, con la presencia de contaminantes persistentes como múltiples pesticidas[xli] o algunos PCBs (policlorobifenilos)[xlii].
En cuanto al cáncer de vejiga canino, se ha asociado una mayor probabilidad de padecerlo a una elevada exposición de los perros a algunos retardantes de llama o ftalatos, entre otros compuestos[xliii] que están presentes con frecuencia en entornos domésticos o en los alimentos, pero también a los trihalometanos[xliv], subproductos de la cloración de las aguas que pueden estar en el agua potable y en las piscinas[xlv], entre otros posibles factores[xlvi]. En el caso de alguna raza de perro especialmente susceptible (como el terrier escocés) habría sido vinculado al uso de herbicidas en el jardín[xlvii] o de insecticidas domésticos (en este caso se daría un riesgo más de tres veces superior)[xlviii].
En cuanto a los gatos, diversas investigaciones han asociado también la exposición a sustancias tóxicas con efectos adversos en su salud. Por solo citar un ejemplo, el cáncer oral de las células escamosas, que afecta a muchos felinos, ha sido vinculado en alguna investigación al uso de collares antipulgas que podrían contener algunos pesticidas de riesgo[xlix], pudiendo incrementarse la probabilidad de tenerlo hasta cinco veces en comparación con los gatos sin esos collares[l]. Todo en relación probablemente con la costumbre gatuna de asearse lamiéndose el pelaje. Se ha citado también como posible factor de riesgo el alto consumo de comida enlatada para gatos[li] frente a otros tipos de dieta. Otra investigación[lii] apuntaba hacia alimentos para mascotas con aditivos químicos (como colorantes, potenciadores del sabor y conservantes).
El papel de los alteradores hormonales
Una de las principales preocupaciones en relación con perros y gatos, como en el caso de los humanos, es el efecto que pueden tener, en concreto, las sustancias disruptoras endocrinas o alteradoras hormonales[liii], sustancias que han sido medidas en el aparato reproductor, grasas, sangre, orina y pelaje de estos animales, lo cual podría tener consecuencias en ellos[liv]. Entre ellas, el llamado síndrome de disgenesia testicular en los perros, que podría ir de la mano con una peor calidad del semen[lv] y/o con malformaciones genitales[lvi] que han sido vinculadas con la exposición a sustancias como algunos retardantes de llama[lvii], PCBs[lviii] o ftalatos[lix]. Este síndrome también puede manifestarse en algunos casos con el cáncer testicular canino que, al igual que en los humanos, ha crecido en prevalencia[lx]. Algunos datos sugieren que los contaminantes químicos también podrían tener algunos efectos hormonales adversos en el caso de las perras, aparte del cáncer de mama antes citado, así como estar ligados a una alteración de la proporción de machos y hembras en las camadas[lxi].
Otros problemas que han llamado la atención de los científicos son los ligados al tiroides. Sustancias como los PCB[lxii] habrían sido asociadas a hipotiroidismo en los canes, así como al cada vez más frecuente[lxiii] hipertiroidismo felino[lxiv], que afectaría globalmente a uno de cada diez gatos. A este último trastorno también habrían sido vinculadas sustancias presentes en el polvo doméstico, como es el caso de algunos retardantes de llama[lxv] o los PFAS[lxvi], además de otras que, como los bisfenoles[lxvii], pueden llegar al gato especialmente a través de alimentos enlatados[lxviii].
__________________________________
[i] En España en uno de cada tres hogares se convive con al menos un animal de compañía, y así, según la información resultante de los registros de animales de compañía de las comunidades autónomas, en la actualidad hay más de trece millones de animales de compañía registrados e identificados.
Ley 7/2023, de 28 de marzo, de protección de los derechos y el bienestar de los animales. https://www.boe.es/buscar/doc.php?id=BOE-A-2023-7936
[ii] Según datos recogidos en 2023
https://es.statista.com/estadisticas/592945/numero-de-perros-en-espana/
[iii]https://hamilton.global/nuevos-habitos-y-perfiles-petparent-espana/
[iv]Ley 7/2023, de 28 de marzo, de protección de los derechos y el bienestar de los animales.https://www.boe.es/buscar/doc.php?id=BOE-A-2023-7936
[v] Pets can be valuable sentinels of environmental exposures. National Academies workshop explored how companion animals can inform understanding of human health.
https://factor.niehs.nih.gov/2022/1/feature/3-feature-sentinels
Wise CF, Hammel SC, Herkert N, Ma J, Motsinger-Reif A, Stapleton HM, Breen M. Comparative Exposure Assessment Using Silicone Passive Samplers Indicates That Domestic Dogs Are Sentinels To Support Human Health Research. Environ Sci Technol. 2020 Jun 16;54(12):7409-7419. doi: 10.1021/acs.est.9b06605. Epub 2020 May 28. PMID: 32401030; PMCID: PMC7655112.
https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/32401030/
[vi] Siempre con los debidos matices derivados de las diferencias entre especies
Dogs can be «early warning systems» for exposure to toxic chemicals in the home.
Cánceres caninos como el de mama o los linfomas se han establecido como modelos a monitorizar por las similitudes existentes entre los procesos patológicos en ambas especies. También el cáncer oral de células escamosas de los gatos ha sido tomado como modelo para el cáncer escamocelular de cabeza y cuello humano. Lo mismo podría decirse de otras patologías. Ello se refleja en las investigaciones científicas que se citan más adelante
[vii] Catherine F. Wise, Matthew Breen, Heather M. Stapleton. Canine on the Couch: The New Canary in the Coal Mine for Environmental Health Research. Environment & Health 2024, 2 (8) , 517-529. https://doi.org/10.1021/envhealth.4c00029
https://pubs.acs.org/doi/10.1021/envhealth.4c00029
https://pmc.ncbi.nlm.nih.gov/articles/PMC11334179/
Arnold C. From Canaries to Cats: Domestic Animals as Sentinels for Human Exposure Effects. Environ Health Perspect. 2023 Nov;131(11):112001. doi: 10.1289/EHP12949. Epub 2023 Nov 15. PMID: 37966804; PMCID: PMC10650500. https://pmc.ncbi.nlm.nih.gov/articles/PMC10650500/
[viii] Hegedus C, Andronie L, Uiuiu P, Jurco E, Lazar EA, Popescu S. Pets, Genuine Tools of Environmental Pollutant Detection. Animals (Basel). 2023 Sep 14;13(18):2923. doi: 10.3390/ani13182923. PMID: 37760323; PMCID: PMC10525180. https://pmc.ncbi.nlm.nih.gov/articles/PMC10525180/
Se habrían medido niveles 2,4 veces superiores de PFAS en perros de compañía, niveles 23 veces superiores de retardantes de llama en gatos y 5 veces más de mercurio en comparación con los niveles promedio analizados en humanos.
Otro estudio sugiere interés de analizar presencia de exposición de gatos como indicador de la posible exposición en humanos a retardantes de llama organofosforados:
Henríquez-Hernández LA, Carretón E, Camacho M, Montoya-Alonso JA, Boada LD, Bernal Martín V, Falcón Cordón Y, Falcón Cordón S, Zumbado M, Luzardo OP. Potential Role of Pet Cats As a Sentinel Species for Human Exposure to Flame Retardants. Front Vet Sci. 2017 May 31;4:79. doi: 10.3389/fvets.2017.00079. PMID: 28620612; PMCID: PMC5449440.
https://pmc.ncbi.nlm.nih.gov/articles/PMC5449440/
Lo mismo se ha visto para otras sustancias:
Dirtu A.C., Niessen S.J., Jorens P.G., Covaci A. Organohalogenated contaminants in domestic cats’ plasma in relation to spontaneous acromegaly and type 2 diabetes mellitus: A clue for endocrine disruption in humans? Environ. Int. 2013;57–58:60–67. doi: 10.1016/j.envint.2013.04.004.
https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/23672960/
[ix] El tiempo transcurrido entre una exposición ambiental y el desarrollo de una enfermedad asociada en una mascota es más acelerado que en los humanos, del orden de años en lugar de décadas
[x]Por otro lado, los animales suelen tener menos movilidad, permaneciendo más tiempo en el hogar lo que además de incrementar su exposición a una serie de sustancias en esos entornos facilita la posible identificación de las mismas como factores causales. Los animales no comparten la exposición de sus dueños fuera del hogar, como en el trabajo, por ejemplo. También facilita la identificación de qué sustancias pueden estar involucradas la mayor homogeneidad en sus hábitos y una menor concurrencia de algunos factores que, como sucede con las personas, podrían inducir a confusión en los estudios epidemiológicos sobre ellos.
[xi]Sexton C, Ruple A. Canine sentinels and our shared exposome. Science. 2024 Jun 14;384(6701):1170-1172. doi: 10.1126/science.adl0426. Epub 2024 Jun 13. PMID: 38870288.
https://www.science.org/doi/10.1126/science.adl0426
Catherine F. Wise et al. Comparative Exposure Assessment Using Silicone Passive Samplers Indicates That Domestic Dogs Are Sentinels To Support Human Health Research. Environmental Science & Technology Vol 54/Issue 12.2020. https://pubs.acs.org/doi/10.1021/acs.est.9b06605
Rabinowitz P.M.G., Odofin L., Dein F.J. From “Us vs. Them” to “Shared Risk”: Can Animals Help Link Environmental Factors to Human Health? Ecohealth. 2008;5:224–229. doi: 10.1007/s10393-008-0170-4.
[xii] Procedentes, por ejemplo, de muebles tapizados u otras vías
[xiii] Recubrimientos resistentes a las manchas en muebles tapizados, telas y encerado de pisos.
[xiv] Mensching D.A., Slater M., Scott J.W., Ferguson D.C., Beasley V.R. The Feline Thyroid Gland: A Model for Endocrine Disruption by Polybrominated Diphenyl Ethers (PBDEs)? J. Toxicol. Environ. Health A. 2012;75:201–212. doi: 10.1080/15287394.2012.652054.
Guo W., Park J.S., Wang Y., Gardner S., Baek C., Petreas M., Hooper K. High Polybrominated Diphenyl Ether Levels in California House Cats: House Dust a Primary Source? Environ. Toxicol. Chem. 2012;31:301–306. doi: 10.1002/etc.1700.
Chow K., Hearn L.K., Zuber M., Beatty J.A., Mueller J.F., Barrs V.R. Evaluation of Polybrominated Diphenyl Ethers (PBDEs) in Matched Cat Sera and House Dust Samples: Investigation of a Potential Link between PBDEs and Spontaneous Feline Hyperthyroidism. Environ. Res. 2015;136:173–179. doi: 10.1016/j.envres.2014.09.027.
Bost P.C., Strynar M.J., Reiner J.L., Zweigenbaum J.A., Secoura P.L., Lindstrom A.B., Dye J.A. U.S. Domestic Cats as Sentinels for Perfluoroalkyl Substances: Possible Linkages with Housing, Obesity, and Disease. Environ. Res. 2016;151:145–153. doi: 10.1016/j.envres.2016.07.027.
Wang M., Guo W., Gardner S., Petreas M., Park J.S. Per- and Polyfluoroalkyl Substances in Northern California Cats: Temporal Comparison and a Possible Link to Cat Hyperthyroidism. Environ. Toxicol. Chem. 2018;37:2523–2529. doi: 10.1002/etc.4239.
Weiss J.M., Jones B., Koekkoek J., Bignert A., Lamoree M.H. Per- and Polyfluoroalkyl Substances (PFASs) in Swedish Household Dust and Exposure of Pet Cats. Environ. Sci. Pollut. Res. Int. 2021;28:39001–39013. doi: 10.1007/s11356-021-13343-5.
[xv] U.S. EPA . Exposure Factors Handbook (1997, Final Report) U.S. Environmental Protection Agency; Washington, DC, USA: 1997.
Stapleton H.M., Dodder N.G., Offenberg J.H., Schantz M.M., Wise S.A. Polybrominated Diphenyl Ethers in House Dust and Clothes Dryer Lint. Environ. Sci. Technol. 2005;39:925–931. doi: 10.1021/es0486824.
ischer D., Hooper K., Athanasiadou M., Athanassiadis I., Bergman Å. Children Show Highest Levels of Polybrominated Diphenyl Ethers in a California Family of Four: A Case Study. Environ. Health Perspect. 2006;114:1581–1584. doi: 10.1289/ehp.8554.
[xvi] Matheson R, Sexton CL, Wise CF, O’Brien J, Keyser AJ, Kauffman M, Dunbar MD; DAP Consortium; Stapleton HM, Ruple A. Silicone tags as an effective method of monitoring environmental contaminant exposures in a geographically diverse sample of dogs from the Dog Aging Project. Front Vet Sci. 2024 Aug 16;11:1394061. doi: 10.3389/fvets.2024.1394061. PMID: 39220770; PMCID: PMC11363705.
https://pmc.ncbi.nlm.nih.gov/articles/PMC11363705/
Li ZM, Kannan K. Urinary and Fecal Excretion of 121 Environmental Chemicals in Pet Dogs and Cats: Significance of Feces in Biomonitoring of Exposures. Environ Sci Technol. 2024 Aug 13;58(32):14169-14179. doi: 10.1021/acs.est.4c05991. Epub 2024 Jul 30. PMID: 39081038.
Ali N., Malik R.N., Mehdi T., Eqani S.A.M.A.S., Javeed A., Neels H., Covaci A. Organohalogenated Contaminants (OHCs) in the Serum and Hair of Pet Cats and Dogs: Biosentinels of Indoor Pollution. Sci. Total Environ. 2013;449:29–36. doi: 10.1016/j.scitotenv.2013.01.037.
Brits M., Gorst-Allman P., Rohwer E.R., de Vos J., de Boer J., Weiss J.M. Comprehensive Two-Dimensional Gas Chromatography Coupled to High Resolution Time-of-Flight Mass Spectrometry for Screening of Organohalogenated Compounds in Cat Hair. J. Chromatogr. A. 2018;1536:151–162. doi: 10.1016/j.chroma.2017.08.055.
González-Gómez X., Cambeiro-Pérez N., Martínez-Carballo E., Simal-Gándara J. Screening of Organic Pollutants in Pet Hair Samples and the Significance of Environmental Factors. Sci. Total Environ. 2018;625:311–319. doi: 10.1016/j.scitotenv.2017.12.270.
Norrgran Engdahl J., Bignert A., Jones B., Athanassiadis I., Bergman, Weiss J.M. Cats’ Internal Exposure to Selected Brominated Flame Retardants and Organochlorines Correlated to House Dust and Cat Food. Environ. Sci. Technol. 2017;51:3012–3020. doi: 10.1021/acs.est.6b05025.
González-Gómez, X. Figueiredo-González, M. Villar-López, R. Martínez-Carballo, E.Biomonitoring of organic pollutants in pet dog plasma samples in North-Western Spain. Science of the Total Environment
1879-1026, 0048-9697. 2023, Volume: 867
[xvii] Ali N., Malik R.N., Mehdi T., Eqani S.A.M.A.S., Javeed A., Neels H., Covaci A. Organohalogenated Contaminants (OHCs) in the Serum and Hair of Pet Cats and Dogs: Biosentinels of Indoor Pollution. Sci. Total Environ. 2013;449:29–36. doi: 10.1016/j.scitotenv.2013.01.037
Storelli M.M., Storelli A., Barone G., Franchini D. Accumulation of Polychlorinated Biphenyls and Organochlorine Pesticide in Pet Cats and Dogs: Assessment of Toxicological Status. Sci. Total Environ. 2009;408:64–68. doi: 10.1016/j.scitotenv.2009.09.018.
Venier M., Hites R.A. Flame Retardants in the Serum of Pet Dogs and in Their Food. Environ. Sci. Technol. 2011;45:4602–4608. doi: 10.1021/es1043529.
[xviii] Por ejemplo, en el caso de los perros, a retardantes de llama organofosforados
Park SH, Yun PJ, Hong Y, Kim KT, Choo G. Organophosphate flame retardants and their metabolites in paired dog food and urine: Pet exposure through food consumption. Chemosphere. 2025 Feb;370:143960. doi: 10.1016/j.chemosphere.2024.143960. Epub 2024 Dec 19. Erratum in: Chemosphere. 2025 Mar;372:144128. doi: 10.1016/j.chemosphere.2025.144128. PMID: 39694294.
https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/39694294/
[xix]Rumbeiha W., Morrison J. A Review of Class I and Class II Pet Food Recalls Involving Chemical Contaminants from 1996 to 2008. J. Med. Toxicol. 2011;7:60–66. doi: 10.1007/s13181-010-0123-5.
- Kei Nomiyama, Fuka Sato, Makoto Shimasaki, Hazuki Mizukawa, KraisiriKhidkhan, Yoshinori Ikenaka, Mayumi Ishizuka. Assessment of Organohalogen Compounds Contamination in Pet Food and Associated Health Risks: A Case Study in Japan. Environmental Monitoring and Contaminants Research 2024, 4 (0) , 38-54. https://doi.org/10.5985/emcr.20230009
[xx] Lea R.G., Byers A.S., Sumner R.N., Rhind S.M., Zhang Z., Freeman S.L., Moxon R., Richardson H.M., Green M., Craigon J., et al. Environmental Chemicals Impact Dog Semen Quality in Vitro and May Be Associated with a Temporal Decline in Sperm Motility and Increased Cryptorchidism. Sci. Rep. 2016;6:31281. doi: 10.1038/srep31281. https://pmc.ncbi.nlm.nih.gov/articles/PMC4977511/
[xxi]Sustancias tóxicas comoftalatos, PCBs y/o retardantes de llama, a veces en altas concentraciones, han sido detectados en comida seca para gatos
Braouezec C., Enriquez B., Blanchard M., Chevreuil M., Teil M.J. Cat Serum Contamination by Phthalates, PCBs, and PBDEs versus Food and Indoor Air. Environ. Sci. Pollut. Res. Int. 2016;23:9574–9584. doi: 10.1007/s11356-016-6063-0.
Kunisue T., Nakanishi S., Watanabe M., Abe T., Nakatsu S., Kawauchi S., Sano A., Horii A., Kano Y., Tanabe S. Contamination Status and Accumulation Features of Persistent Organochlorines in Pet Dogs and Cats from Japan. Environ. Pollut. 2005;136:465–476. doi: 10.1016/j.envpol.2004.12.039.
Ruiz-Suárez N., Camacho M., Boada L.D., Henríquez-Hernández L.A., Rial C., Valerón P.F., Zumbado M., González M.A., Luzardo O.P. The Assessment of Daily Dietary Intake Reveals the Existence of a Different Pattern of Bioaccumulation of Chlorinated Pollutants between Domestic Dogs and Cats. Sci. Total Environ. 2015;530–531:45–52. doi: 10.1016/j.scitotenv.2015.05.070.
Ežerskis Z., Morkunas V., Suman M., Simoneau C. Analytical Screening of Polyadipates and Other Plasticisers in Poly(Vinyl Chloride) Gasket Seals and in Fatty Food by Gas Chromatography–Mass Spectrometry. Anal. Chim. Acta. 2007;604:29–38. doi: 10.1016/j.aca.2007.04.047.
Dye J.A., Venier M., Zhu L., Ward C.R., Hites R.A., Birnbaum L.S. Elevated PBDE Levels in Pet Cats: Sentinels for Humans? Environ. Sci. Technol. 2007;41:6350–6356. doi: 10.1021/es0708159.
[xxii] Kang J.H., Kondo F. Determination of Bisphenol A in Canned Pet Foods. Res. Vet. Sci. 2002;73:177–182. doi: 10.1016/S0034-5288(02)00102-9.
Schecter A., Malik N., Haffner D., Smith S., Harris T.R., Paepke O., Birnbaum L. Bisphenol A (BPA) in U.S. Food. Environ. Sci. Technol. 2010;44:9425–9430. doi: 10.1021/es102785d.
[xxiii] Wooten K.J., Smith P.N. Canine Toys and Training Devices as Sources of Exposure to Phthalates and Bisphenol A: Quantitation of Chemicals in Leachate and in Vitro Screening for Endocrine Activity. Chemosphere. 2013;93:2245–2253. doi: 10.1016/j.chemosphere.2013.07.075.
[xxiv] .EU Directive 2009/48/EC of the European Parliament and of the Council on the Safety of Toys (Text with EEA Relevance) Off. J. Eur. Union. 2009;L170/1–37
[xxv] Li ZM, Robinson M, Kannan K. An assessment of exposure to several classes of pesticides in pet dogs and cats from New York, United States. Environ Int. 2022 Nov;169:107526. doi: 10.1016/j.envint.2022.107526. Epub 2022 Sep 14. PMID: 36155914; PMCID: PMC9574881.
https://pmc.ncbi.nlm.nih.gov/articles/PMC9574881/
Kannan K, Li ZM, Robinson M. An Assessment of Exposure to Organophosphate, Pyrethroid, and Neonicotinoid Pesticides in Pet Dogs and Cats from New York, United States. SSRN Electronic Journal 2022, 24 https://doi.org/10.2139/ssrn.4160417
[xxvi]La orina canina contenía concentraciones más altas de neonicotinoides que la de los humanos de todos los grupos de edad
[xxvii] Wise CF, Hammel SC, Herkert NJ, Ospina M, Calafat AM, Breen M, Stapleton HM. Comparative Assessment of Pesticide Exposures in Domestic Dogs and Their Owners Using Silicone Passive Samplers and Biomonitoring. Environ Sci Technol. 2022 Jan 18;56(2):1149-1161. doi: 10.1021/acs.est.1c06819. Epub 2021 Dec 29. PMID: 34964617; PMCID: PMC10150270.
https://pmc.ncbi.nlm.nih.gov/articles/PMC10150270/
[xxviii] Se habrían medido en los niños mayores concentraciones que en los adultos
Cochran RC, Yu L, Krieger RI, Ross JH. Postapplication Fipronil Exposure Following Use on Pets. J Toxicol Environ Health A. 2015;78(19):1217-26. doi: 10.1080/15287394.2015.1076363. Epub 2015 Oct 5. PMID: 26437174. https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/26437174/
En otro orden de cosas, un estudio asociaba la exposición intrauterina a la fipronil sulfona (un metabolito del fipronil) a efectos adversos en los niños:
Kim YA, Yoon YS, Kim HS, Jeon SJ, Cole E, Lee J, Kho Y, Cho YH. Distribution of fipronil in humans, and adverse health outcomes of in utero fipronil sulfone exposure in newborns. Int J Hyg Environ Health. 2019 Apr;222(3):524-532. doi: 10.1016/j.ijheh.2019.01.009. Epub 2019 Feb 2. PMID: 30718154.
https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/30718154/.
Diferentes estudios mostraron como diversos tipos de productos antiparasitarios para perros podían generar cierto grado de contaminación en el interior de las casas:
Dyk MB, Chen Z, Mosadeghi S, Vega H, Krieger R. Pilot biomonitoring of adults and children following use of chlorpyrifos shampoo and flea collars on dogs. J Environ Sci Health B. 2011;46(1):97-104. doi: 10.1080/03601234.2011.534966. PMID: 21240711.
Driver JH, Ross JH, Holden LR, Selim S, Sharp JK, Carlson D, Nouvel L. Cyphenothrin Flea and Tick Squeeze-On for Dogs: Evaluation of Potential Health Risks Based on the Results of Observational Biological Monitoring. J Toxicol Environ Health A. 2015;78(17):1105-21. doi: 10.1080/15287394.2015.1050712. Epub 2015 Aug 20. PMID: 26291751..
[xxix] Reynolds PM, Reif JS, Ramsdell HS, Tessari JD. Canine exposure to herbicide-treated lawns and urinary excretion of 2,4-dichlorophenoxyacetic acid. Cancer Epidemiol Biomarkers Prev. 1994 Apr-May;3(3):233-7. PMID: 8019373. https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/8019373/
[xxx] Morgan MK, Stout DM, Jones PA, Barr DB. An observational study of the potential for human exposures to pet-borne diazinon residues following lawn applications. Environ Res. 2008 Jul;107(3):336-42. doi: 10.1016/j.envres.2008.03.004. Epub 2008 Apr 29. PMID: 18448091.
https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/18448091/
[xxxi]Como ocurre los PFAS del agua del grifo en una localidad contaminada o la exposición a determinadas concentraciones de compuestos orgánicos volátiles tóxicos que pueden estar presentes en algunos hogares
Rock KD, Polera ME, Guillette TC, Starnes HM, Dean K, Watters M, Stevens-Stewart D, Belcher SM. Domestic Dogs and Horses as Sentinels of Per- and Polyfluoroalkyl Substance Exposure and Associated Health Biomarkers in Gray’s Creek North Carolina. Environ Sci Technol. 2023 Jul 4;57(26):9567-9579. doi: 10.1021/acs.est.3c01146. Epub 2023 Jun 20. PMID: 37340551; PMCID: PMC10802174.
https://pmc.ncbi.nlm.nih.gov/articles/PMC10802174/
Pal VK, Kannan K. Assessment of exposure to volatile organic compounds through urinary concentrations of their metabolites in pet dogs and cats from the United States. Environ Pollut. 2023 Jan 1;316(Pt 2):120576. doi: 10.1016/j.envpol.2022.120576. Epub 2022 Nov 3. PMID: 36336188.
https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/36336188/
[xxxii]Pocar P, Grieco V, Aidos L, Borromeo V. Endocrine-Disrupting Chemicals and Their Effects in Pet Dogs and Cats: An Overview. Animals (Basel). 2023 Jan 22;13(3):378. doi: 10.3390/ani13030378. PMID: 36766267; PMCID: PMC9913107. https://pmc.ncbi.nlm.nih.gov/articles/PMC9913107/
[xxxiii] Gardner H. L.; Fenger J. M.; London C. A. Dogs as a Model for Cancer. Annu. Rev. AnimBiosci 2016, 4, 199–222. 10.1146/annurev-animal-022114-110911
[xxxiv] Asociación Médica Veterinaria Americana. https://www.avma.org/resources/pet-owners/petcare/cancer-pets
[xxxv] Takashima-Uebelhoer BB, Barber LG, Zagarins SE, Procter-Gray E, Gollenberg AL, Moore AS, Bertone-Johnson ER. Household chemical exposures and the risk of canine malignant lymphoma, a model for human non-Hodgkin’s lymphoma. Environ Res. 2012 Jan;112:171-6. doi: 10.1016/j.envres.2011.12.003. Epub 2012 Jan 4. PMID: 22222006; PMCID: PMC3267855.
https://pmc.ncbi.nlm.nih.gov/articles/PMC3267855/
Hayes HM, Tarone RE, Cantor KP. On the association between canine malignant lymphoma and opportunity for exposure to 2,4-dichlorophenoxyacetic acid. Environ Res. 1995 Aug;70(2):119-25. doi: 10.1006/enrs.1995.1056. PMID: 8674480.
https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/8674480/
Hayes HM, Tarone RE, Cantor KP, Jessen CR, McCurnin DM, Richardson RC. Case-control study of canine malignant lymphoma: positive association with dog owner’s use of 2,4-dichlorophenoxyacetic acid herbicides. J Natl Cancer Inst. 1991 Sep 4;83(17):1226-31. doi: 10.1093/jnci/83.17.1226. PMID: 1870148.
https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/1870148/
Schofield I, Stevens KB, Pittaway C, O’Neill DG, Fecht D, Dobson JM, Brodbelt DC. Geographic distribution and environmental risk factors of lymphoma in dogs under primary-care in the UK. J Small Anim Pract. 2019 Dec;60(12):746-754. doi: 10.1111/jsap.13075. Epub 2019 Nov 10. PMID: 31709551.
https://onlinelibrary.wiley.com/doi/10.1111/jsap.13075
[xxxvi] Como el 2,4 D en el caso del alguna investigación
[xxxvii]Gavazza A, Presciuttini S, Barale R, Lubas G, Gugliucci B. Association between canine malignant lymphoma, living in industrial areas, and use of chemicals by dog owners. J VetInternMed. 2001 May-Jun;15(3):190-5. PMID: 11380026.
[xxxviii] Algún estudio se centró en razas que, como los bóxers, tienen más riesgo de padecer este problema, especialmente si vivían en la proximidad de alguna industria o instalaciones que –como incineradoras de residuos- puedan liberar una serie de sustancias tóxicas
Craun K, Ekena J, Sacco J, Jiang T, Motsinger-Reif A, Trepanier LA. Genetic and environmental risk for lymphoma in boxer dogs. J Vet Intern Med. 2020 Sep;34(5):2068-2077. doi: 10.1111/jvim.15849. Epub 2020 Jul 15. PMID: 32667715; PMCID: PMC7517848.
https://pmc.ncbi.nlm.nih.gov/articles/PMC7517848/
Pastor M, Chalvet‐Monfray K, Marchal T, et al. Genetic and environmental risk indicators in canine non‐Hodgkin’s lymphomas: breed associations and geographic distribution of 608 cases diagnosed throughout France over 1 year. J Vet Intern Med. 2009;23:301‐310.
https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/19192140/
[xxxix] Andrade FH, Figueiroa FC, Bersano PR, Bissacot DZ, Rocha NS. Malignant mammary tumor in female dogs: environmental contaminants. DiagnPathol. 2010 Jun 30;5:45. doi: 10.1186/1746-1596-5-45. PMID: 20587072; PMCID: PMC2909155. https://pmc.ncbi.nlm.nih.gov/articles/PMC2909155/
[xl] Los piretroides identificados en el estudio fueron aletrina, cihalotrina, cipermetrina, deltametrina y tetrametrina
[xli] Gautam S, Sood NK, Gupta K, Joshi C, Gill KK, Kaur R, Chauhan I. Bioaccumulation of pesticide contaminants in tissue matrices of dogs suffering from malignant canine mammary tumors in Punjab, India. Heliyon. 2020 Oct 29;6(10):e05274. doi: 10.1016/j.heliyon.2020.e05274. PMID: 33163644; PMCID: PMC7610237. https://pmc.ncbi.nlm.nih.gov/articles/PMC7610237/
[xlii] Sévère S, Marchand P, Guiffard I, Morio F, Venisseau A, Veyrand B, Le Bizec B, Antignac JP, Abadie J. Pollutants in pet dogs: a model for environmental links to breast cancer. Springerplus. 2015 Jan 22;4:27. doi: 10.1186/s40064-015-0790-4. PMID: 25646150; PMCID: PMC4310831.
https://pmc.ncbi.nlm.nih.gov/articles/PMC4310831/
[xliii] Wise CF, Herkert NJ, Hoffman K, Vaden S, Breen M, Stapleton HM. Environmental Exposures and Canine Bladder Cancer: A Case Control Study Using Silicone Passive Samplers. Environ Sci Technol. 2025 Jan 21;59(2):1121-1132. doi: 10.1021/acs.est.4c09271. Epub 2025 Jan 9. PMID: 39786168.
https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/39786168/
[xliv] Braman SL, Peterson H, Elbe A, Mani E, Danielson C, Dahman C, Labadie JD, Trepanier LA. Urinary and household chemical exposures in pet dogs with urothelial cell carcinoma. Vet Comp Oncol. 2024 Jun;22(2):217-229. doi: 10.1111/vco.12968. Epub 2024 Feb 22. PMID: 38388159.
https://onlinelibrary.wiley.com/doi/10.1111/vco.12968
[xlv]Los autores llegaban a aconsejar a los dueños de los perros, especialmente aquellos de razas con mayor predisposición a contraer la enfermedad que consideren limitar el acceso de los perros a las piscinas que puedan tener cierta presencia de estos contaminantes e incluso que, en el caso del agua potable la posibilidad de “instalar unidades de filtración de agua que eliminen los trihalometanos totales”.
[xlvi] Hace tiempo se asoció también a bañosinsecticidas contra pulgas y garrapatas o a exposiciones ligadas a zonas con actividad industrial
Glickman LT, Schofer FS, McKee LJ, Reif JS, Goldschmidt MH. Epidemiologic study of insecticide exposures, obesity, and risk of bladder cancer in household dogs. J Toxicol Environ Health. 1989;28(4):407-14. doi: 10.1080/15287398909531360. PMID: 2593174.
https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/2593174/
Hayes HM Jr, Hoover R, Tarone RE. Bladder cancer in pet dogs: asentinel for environmental cancer? Am J Epidemiol. 1981;114(2):229-233.3.
Luethcke KR, Ekena J, Chun R, Trepanier LA. GlutathioneS-transferase theta genotypes and environmental exposures in therisk of canine transitional cell carcinoma. J Vet Intern Med. 2019;33(3):1414-1422.
[xlvii] Glickman LT, Raghavan M, Knapp DW, Bonney PL, Dawson MH. Herbicide exposure and the risk of transitional cell carcinoma of the urinary bladder in Scottish Terriers. J Am Vet Med Assoc. 2004 Apr 15;224(8):1290-7. doi: 10.2460/javma.2004.224.1290. PMID: 15112777.
https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/15112777/
Los autores aconsejaban entonces que, de forma preventiva, en tanto no hubiese más datos, “los dueños de Scottish Terriers deben minimizar el acceso de sus perros a céspedes o jardines tratados con herbicidas fenoxi”. Los incrementos de riesgo que habían encontrado eran considerables. Comentaban que “en Scottish Terriers expuestos a herbicidas fenólicos es 4,4 veces mayor que en Scottish Terriers sin dicha exposición”
[xlviii]Luethcke KR, Ekena J, Chun R, Trepanier LA. Glutathione S-transferase theta genotypes and environmental exposures in the risk of canine transitional cell carcinoma. J Vet Intern Med. 2019 May;33(3):1414-1422. doi: 10.1111/jvim.15504. Epub 2019 Apr 22. PMID: 31008543; PMCID: PMC6524089. https://pmc.ncbi.nlm.nih.gov/articles/PMC6524089/
[xlix] Noall L, Lee S, Burton JH, Marquardt TM, Cermak J, Thombs LA, Rogic AM, Bryan JN, Chu S. A multi-institutional epidemiologic study evaluating environmental risk factors for feline oral squamous cell carcinoma. Vet Comp Oncol. 2023 Sep;21(3):509-519. doi: 10.1111/vco.12914. Epub 2023 May 27. PMID: 37243409. https://onlinelibrary.wiley.com/doi/10.1111/vco.12914
[l] Bertone ER, Snyder LA, Moore AS. Environmental and lifestyle risk factors for oral squamous cell carcinoma in domestic cats. J Vet Intern Med. 2003 Jul-Aug;17(4):557-62. PMID: 12892308.
https://onlinelibrary.wiley.com/doi/epdf/10.1111/j.1939-1676.2003.tb02478.x
[li] Un riesgo hasta tres veces mayor en comparación con los gatos que no tenían ese consumo. Se aludía también, separadamente, al consumo de atún enlatado
[lii]Zaccone R, Renzi A, Chalfon C, Lenzi J, Bellei E, Marconato L, Ros E, Rigillo A, Bettini G, Faroni E, Guerra D, Sabattini S. Environmental risk factors for the development of oral squamous cell carcinoma in cats. J Vet Intern Med. 2022 Jul;36(4):1398-1408. doi: 10.1111/jvim.16372. Epub 2022 May 27. PMID: 35633064; PMCID: PMC9308430. https://pmc.ncbi.nlm.nih.gov/articles/PMC9308430/
[liii]Entre ellas se cuentan: PCBs, pesticidas organoclorados, compuestos relacionados con las dioxinas, ftalatos, BPA, retardantes de llama, PFAS, etc.
[liv]Pocar P, Grieco V, Aidos L, Borromeo V. Endocrine-Disrupting Chemicals and Their Effects in Pet Dogs and Cats: An Overview. Animals (Basel). 2023 Jan 22;13(3):378. doi: 10.3390/ani13030378. PMID: 36766267; PMCID: PMC9913107. https://pmc.ncbi.nlm.nih.gov/articles/PMC9913107/
[lv] La calidad del semen canino habría caído un 30% en 26 años según: Lea R.G., Byers A.S., Sumner R.N., Rhind S.M., Zhang Z., Freeman S.L., Moxon R., Richardson H.M., Green M., Craigon J., et al. Environmental Chemicals Impact Dog Semen Quality in Vitro and May Be Associated with a Temporal Decline in Sperm Motility and Increased Cryptorchidism. Sci. Rep. 2016;6:31281. doi: 10.1038/srep31281.
[lvi] Como la criptorquidia
[lvii] Sumner R.N., Byers A., Zhang Z., Agerholm J.S., Lindh L., England G.C.W., Lea R.G. Environmental Chemicals in Dog Testes Reflect Their Geographical Source and May Be Associated with Altered Pathology. Sci. Rep. 2021;11:7361. doi: 10.1038/s41598-021-86805-y.
Lea R.G., Byers A.S., Sumner R.N., Rhind S.M., Zhang Z., Freeman S.L., Moxon R., Richardson H.M., Green M., Craigon J., et al. Environmental Chemicals Impact Dog Semen Quality in Vitro and May Be Associated with a Temporal Decline in Sperm Motility and Increased Cryptorchidism. Sci. Rep. 2016;6:31281. doi: 10.1038/srep31281.
[lviii] Lea R.G., Byers A.S., Sumner R.N., Rhind S.M., Zhang Z., Freeman S.L., Moxon R., Richardson H.M., Green M., Craigon J., et al. Environmental Chemicals Impact Dog Semen Quality in Vitro and May Be Associated with a Temporal Decline in Sperm Motility and Increased Cryptorchidism. Sci. Rep. 2016;6:31281. doi: 10.1038/srep31281.
Sumner R.N., Tomlinson M., Craigon J., England G.C.W., Lea R.G. Independent and Combined Effects of Diethylhexyl Phthalate and Polychlorinated Biphenyl 153 on Sperm Quality in the Human and Dog. Sci. Rep. 2019;9:3409. doi: 10.1038/s41598-019-39913-9.
Grieco V., Riccardi E., Rondena M., Ciampi V., Finazzi M. Classical and Spermatocytic Seminoma in the Dog: Histochemical and Immunohistochemical Findings. J. Comp. Pathol. 2007;137:41–46. doi: 10.1016/j.jcpa.2007.03.009.
Grieco V., Riccardi E., Greppi G.F., Teruzzi F., Iermanò V., Finazzi M. Canine Testicular Tumours: A Study on 232 Dogs. J. Comp. Pathol. 2008;138:86–89. doi: 10.1016/j.jcpa.2007.11.002.
[lix] Lea R.G., Byers A.S., Sumner R.N., Rhind S.M., Zhang Z., Freeman S.L., Moxon R., Richardson H.M., Green M., Craigon J., et al. Environmental Chemicals Impact Dog Semen Quality in Vitro and May Be Associated with a Temporal Decline in Sperm Motility and Increased Cryptorchidism. Sci. Rep. 2016;6:31281. doi: 10.1038/srep31281.
[lx] Grieco V., Riccardi E., Rondena M., Ciampi V., Finazzi M. Classical and Spermatocytic Seminoma in the Dog: Histochemical and Immunohistochemical Findings. J. Comp. Pathol. 2007;137:41–46. doi: 10.1016/j.jcpa.2007.03.009.
Grieco V., Riccardi E., Greppi G.F., Teruzzi F., Iermanò V., Finazzi M. Canine Testicular Tumours: A Study on 232 Dogs. J. Comp. Pathol. 2008;138:86–89. doi: 10.1016/j.jcpa.2007.11.002.
[lxi] Sumner R.N., Harris I.T., van der Mescht M., Byers A., England G.C.W., Lea R.G. The Dog as a Sentinel Species for Environmental Effects on Human Fertility. Reproduction. 2020;159:R165–R276. doi: 10.1530/REP-20-0042.
Lea R.G., Byers A.S., Sumner R.N., Rhind S.M., Zhang Z., Freeman S.L., Moxon R., Richardson H.M., Green M., Craigon J., et al. Environmental Chemicals Impact Dog Semen Quality in Vitro and May Be Associated with a Temporal Decline in Sperm Motility and Increased Cryptorchidism. Sci. Rep. 2016;6:31281. doi: 10.1038/srep31281
[lxii] Lau G., Walter K., Kass P., Puschner B. Comparison of Polybrominated Diphenyl Ethers (PBDEs) and Polychlorinated Biphenyls (PCBs) in the Serum of Hypothyroxinemic and Euthyroid Dogs. PeerJ. 2017;5:e3780. doi: 10.7717/peerj.3780.
[lxiii] Peterson M.E. Hyperthyroidism in Cats: What’s Causing This Epidemic of Thyroid Disease and Can We Prevent It? J. Feline Med. Surg. 2012;14:804–818. doi: 10.1177/1098612X12464462.
Peterson M.E., Johnson J.G., Andrews L.K. Spontaneous Hyperthyroidism in the Cat. [(accessed on 7 November 2022)]. Available online: https://www.avmi.net/information/hyperthyroid-hints/spontaneous-hyperthyroidism-in-the-cat/
Scarlett J.M., Sydney Moise N., Rayl J. Feline Hyperthyroidism: A Descriptive and Case-Control Study. Prev. Vet. Med. 1988;6:259–309. doi: 10.1016/0167-5877(88)90041-4.
McLean J.L., Lobetti R.G., Schoeman J.P. Worldwide Prevalence and Risk Factors for Feline Hyperthyroidism: A Review. J. S. Afr. Vet. Assoc. 2014;85:EJC163929. doi: 10.4102/jsava.v85i1.1097.
[lxiv]Takaguchi K., Nishikawa H., Mizukawa H., Tanoue R., Yokoyama N., Ichii O., Takiguchi M., Nakayama S.M.M., Ikenaka Y., Kunisue T., et al. Effects of PCB Exposure on Serum Thyroid Hormone Levels in Dogs and Cats. Sci. Total Environ. 2019;688:1172–1183. doi: 10.1016/j.scitotenv.2019.06.300
[lxv] Mensching D.A., Slater M., Scott J.W., Ferguson D.C., Beasley V.R. The Feline Thyroid Gland: A Model for Endocrine Disruption by Polybrominated Diphenyl Ethers (PBDEs)? J. Toxicol. Environ. Health A. 2012;75:201–212. doi: 10.1080/15287394.2012.652054.
Guo W., Park J.S., Wang Y., Gardner S., Baek C., Petreas M., Hooper K. High Polybrominated Diphenyl Ether Levels in California House Cats: House Dust a Primary Source? Environ. Toxicol. Chem. 2012;31:301–306. doi: 10.1002/etc.1700.
[lxvi] Bost P.C., Strynar M.J., Reiner J.L., Zweigenbaum J.A., Secoura P.L., Lindstrom A.B., Dye J.A. U.S. Domestic Cats as Sentinels for Perfluoroalkyl Substances: Possible Linkages with Housing, Obesity, and Disease. Environ. Res. 2016;151:145–153. doi: 10.1016/j.envres.2016.07.027.
Wang M., Guo W., Gardner S., Petreas M., Park J.S. Per- and Polyfluoroalkyl Substances in Northern California Cats: Temporal Comparison and a Possible Link to Cat Hyperthyroidism. Environ. Toxicol. Chem. 2018;37:2523–2529. doi: 10.1002/etc.4239.
Weiss J.M., Jones B., Koekkoek J., Bignert A., Lamoree M.H. Per- and Polyfluoroalkyl Substances (PFASs) in Swedish Household Dust and Exposure of Pet Cats. Environ. Sci. Pollut. Res. Int. 2021;28:39001–39013. doi: 10.1007/s11356-021-13343-5.
[lxvii] Edinboro C.H., Scott-Moncrieff J.C., Janovitz E., Thacker H.L., Glickman L.T. Epidemiologic Study of Relationships between Consumption of Commercial Canned Food and Risk of Hyperthyroidism in Cats. J. Am. Vet. Med. Assoc. 2004;224:879–886. doi: 10.2460/javma.2004.224.879.
[lxviii]Al margen de ello, algún estudio refería que el consumo de algunos alimentos de ese tipo (en algún caso con sabor a pescado) podía ser un factor de riesgo para el desarrollo de hipertiroidismo
Wakeling J., Everard A., Brodbelt D., Elliott J., Syme H. Risk Factors for Feline Hyperthyroidism in the UK. J. Small Anim. Pract. 2009;50:406–414. doi: 10.1111/j.1748-5827.2009.00756.x.
Martin K.M., Rossing M.A., Ryland L.M., DiGiacomo R.E., Freitag W.A. Evaluation of Dietary and Environmental Risk Factors for Hyperthyroidism in Cats. J. Am. Vet. Med. Assoc. 2000;217:853–856. doi: 10.2460/javma.2000.217.853.
Por otro lado, algunos contaminantes persistentes que pueden estar presentes a altas concentraciones en el pescado, como algunos retardantes de llama, también han sido identificados como posibles factores de riesgo.
Ryunosuke Kikuchi, Rosário Plácido Roberto da Costa, Carla Sofia Santos Ferreira. Environmental Implications of the Global Prevalence of Hyperthyroidism in Cats from a “One Health” Perspective. Pollutants 2025, 5 (1) , 8. https://doi.org/10.3390/pollutants5010008
Norrgran Engdahl J., Bignert A., Jones B., Athanassiadis I., Bergman, Weiss J.M. Cats’ Internal Exposure to Selected Brominated Flame Retardants and Organochlorines Correlated to House Dust and Cat Food. Environ. Sci. Technol. 2017;51:3012–3020. doi: 10.1021/acs.est.6b05025.
Mizukawa H, Nomiyama K, Nakatsu S, Iwata H, Yoo J, Kubota A, Yamamoto M, Ishizuka M, Ikenaka Y, Nakayama SM, Kunisue T, Tanabe S. Organohalogen Compounds in Pet Dog and Cat: Do Pets Biotransform Natural Brominated Products in Food to Harmful Hydroxlated Substances? Environ Sci Technol. 2016 Jan 5;50(1):444-52. doi: 10.1021/acs.est.5b04216. Epub 2015 Dec 16. PMID: 26630569.